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Las flores están siempre presentes en los grandes acontecimientos de nuestra vida: nacimientos, cumpleaños, graduaciones, compromisos, bodas, logros profesionales, casas nuevas, funerales... Al añadir flores a cada uno de los hitos de nuestra existencia, damos a la gente un motivo de alegría, de relajación. Aportan energía a una fiesta, sonrisas a los días de la gente. Las flores son la forma más fácil de conectar con la naturaleza, en el día a día.
Lo que nos parece curioso de estas gotas de color y estilo, es que cada tipo de flor lleva un significado propio, e incluso los países tienen su propio símbolo floral, algo que define el espíritu de su gente. Con un amor incurable por la superstición y todo lo etéreo, los italianos miran las flores con asombro y reverencia. Tanto es así que tenemos tres emblemas florales nacionales: el madroño, cuyas flores blancas, frutos rojos y hojas verdes recuerdan los colores de la bandera nacional italiana; el ciclamen alpino, símbolo de devoción y paciencia; y el lirio blanco, que representa la pureza y el culto religioso.
Nos hemos dado cuenta de que incluso las personas que no suelen estar acostumbradas a las flores pueden sentirse atraídas por su simbolismo y su belleza eterna cuando empiezan a desgranar su significado y llegan a su núcleo.
Haz una pequeña prueba por ti mismo y piensa en las flores que te suelen atraer. ¿Cuáles son? ¿Cuál es el mensaje interior que transmiten?